Siguiendo con las dichas y desdichas de la compañía de la manzana, hoy vamos a retroceder en el tiempo para ver una versión de Steve Jobs diferente a la que podemos ver hoy en día. Nos vamos a centrar en el Steve del año 97, aun tiene una bonita melena sin ninguna cana, viste un chaleco negro y aun no ha conseguido esa gran capacidad de oratoria y seguridad en si mismo que podemos ver en sus Keynote's de hoy en día. En la macworldexpo del 97 vemos que el CEO de cupertino no siempre es ovacionado, es mas, algunas de sus propuestas son abucheadas. La guinda del pastel reside que en esa misma presentación podemos ver a un Steve Jobs que ansia colaborar con Microsoft y lanza propuestas como establecer Ineternet Explorer como navegador predefinido en los Mac. Ademas de esto, inicia una videoconferencia con el, en aquel momento, CEO de Microsoft, ¿Os imagináis a Jobs invitando a hablar a Bill Gates en la Macworld? ¿Me creeríais si dijera que fue aplaudido en algunas de sus propuestas? Hay un par de razones para eso, una es que Microsoft decidió invertir 150 millones de dólares en Apple. La segunda es que en aquella época un menos ambicioso que ahora mandamás de Apple no deseaba pelear con su competidora, sino compartir el mercado. Yo tampoco me lo creía, hasta que lo vi...
Ahora la situación es bien diferente, ¿Quien diría que Apple no quiere superar a Microsoft con esos anuncios de Mac vs. Pc? Eso también tiene su explicación, para la que ahora es la segunda mayor compañía del mundo compartir el mercado ya no es suficiente. La historia de la compañía tiene sus detalles simpáticos, como el arrepentido tercer fundador que se fue antes de ver ganancial alguna o el hecho de que a Jobs se le "invitara" a irse de la compañía en los 80, dejando como CEO a John Scully. Pero una cosa si que es cierta, y es que a pesar de las excentricidades y rumores que rodean a Apple, ellos si saben hacer dinero y ganarse el mercado con buenos productos.
Nos vemos!
1 comentario:
Steve y Bill solían salir juntos a cenar con sus respectivas novias. Quien lo diria...
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